La elaboración de la sidra natural comienza con la recolección de la manzana. Etxeberría cuenta con una producción propia muy elevada y dependiendo de la cosecha, se puede estimar en un 60% el consumo de manzana autóctona del País, completándose el resto con manzana Asturiana, Gallega y Bretona.
En Etxeberría se le da mucha importancia a la selección de las distintas variedades de manzana, consiguiendo con ello un equilibrio perfecto de los parámetros del mosto.
Después de la selección comienza el proceso de transformación de la manzana. Un perfecto lavado deja paso al triturado y prensado, todo ello en el menor tiempo posible para obtener un mosto de alta calidad, dando así paso a la fermentación, a temperatura controlada, en depósitos de madera y acero inoxidable.
Este proceso de fermentación se alarga durante tres meses, bajo un estricto control, lo que hace posible que hacia mediados de enero tengamos una sidra natural tierna, preparada para la cata, la cual podremos degustar acompañada de un delicioso menú de sidrería.
El proceso termina con el embotellado de la sidra natural, para lo cual Etxeberria cuenta con unas modernas instalaciones de última generación consiguiendo que todo el proceso se realice en óptimas condiciones, garantizando así un producto de alta calidad y de toda confianza.